Buenas palabras, malas palabras
Más de una vez le pasó que algule dijera “no te entiendo”, a pesar de que ella habla la misma lengua que hablamos todos los demás aquí.
“Es un chiste”
¿Cómo se alumbra la ignorancia? Con información, con tolerancia, con palabras amorosas.
Es cosa de grandes
Nada más lindo que un chiquito de clase media porteña yendo a tomar la merienda a la casa de su compañerito migrante.
“La seño los va a cuidar”
Niños con ramos de flores celebrando que sus mamás ahora son también las maestras del barrio.
Vigilar la ley
Más probable es que la inercia de lo cotidiano se le plante a la letra escrita, ofreciéndole resistencia y tensando lo que propone.
Eran otras épocas
En estas épocas, las escuelas veían en sus estudiantes a seres desprovistos de luz, que de algún modo había que alumbrar.